Carlos Muñoz 4S
El ámbar, es una piedra hecha de resina vegetal fosilizada proveniente principalmente de restos de coníferas.
En la antigüedad se pensaba que el ámbar poseía propiedades místicas o mágicas, siendo utilizado por muchas culturas como un talismán o remedio medicinal. En Chiapas, México, el ámbar aún se usa para proteger a los niños contra el “mal de ojo”. Seguramente los desarrolladores del nuevo proyecto Ámbar –del segmento Premium- le apostaron al nombre como un generador más de suerte para un mercado que sigue ultra competido. El proyecto, ubicado en Roberto Garza Sada, solo incluye cuatro departamentos. Continúa transformándose esa avenida en un espacio de vivienda multifamiliar para los de sangre azul (o ámbar).
Otro proyecto que parece impulsado con propiedades sobrenaturales es la Meseta, que lanza a la venta su torre III. Un proyecto conocido en la zona de Dinastía que hoy presume estar cerca de completarse al 100%.
Sin duda, el valor del parque central de amenidades y las preciosas terrazas de los departamentos de primer piso han hecho de este proyecto una referencia para quienes buscan opciones de exclusividad accesible.
Esta misma zona de la Meseta –que pudiera considerarse la extensión de San Jerónimo-, está por presentar un par de nuevos proyectos. Tan pronto se haga público su lanzamiento tendrán más detalles de mi parte.
Los griegos se percataron de sus propiedades eléctricas producidas al rozar ámbar con otros objetos. De ahí la etimología de la palabra electricidad que viene del griego ἤλεκτρον (élektron) que quiere decir ámbar. Es muy positivo ver la energía que ya corre en la ciudad gracias a los grandes emprendimientos inmobiliarios.
*Carlos Muñoz 4S es gemólogo inmobiliario. Su talento para ver fenómenos naturales y sobrenaturales va mucho más allá del ámbar. Búscalo en carlos@grupo4s.com