Carlos Muñoz 4S
Desde hace poco más de una década las nuevas tecnologías han irrumpido en la vida del ser humano, tanto en su comunicación social como laboral. El profesionista de hoy tiene acceso a la información en casi cualquier lugar del mundo: actualizándose sobre sucesos inmediatos desde la comodidad de su dispositivo móvil, o teniendo conferencias virtuales con colegas que están a miles de kilómetros de distancia.
Según cifras proporcionadas por Steelcase, el usuario medio visita 40 webs al día y consume casi 3 veces la cantidad de información que una persona media consumía en 1960. El mundo se ha convertido en un espacio interconectado que está cambiando la forma de trabajar y hacer negocios.

En este nuevo panorama surge el término “estrategias de trabajo alternativas” que configura las necesidades de las nuevas oficinas. Considerando los beneficios que otorgan las tecnologías móviles, la labor en la oficina ha evolucionado de ser un lugar de procesos de trabajo a un lugar de trabajo creativo.
La búsqueda de generar un mejor espacio de trabajo no debe limitarse solo al bienestar integral, sino también debe alcanzar el producto de ésta, que es tener un empleado comprometido. La falta de compromiso no solo significa improductividad, sino que también representa un mayor gasto para la empresa debido a los problemas de salud física y mental asociada con el estrés.
Para este trabajo creativo se necesitan los siguientes espacios:

  • Estudio para proyectos: espacio privado para los equipos de trabajo o pequeños grupos de colaboración donde comparten contenidos y generan ideas.
  • Workshop Café: escenario informal y social que apoya las conexiones, construye confianza y provee apoyo a los trabajadores móviles.
  • Estudio nómada: espacio para usuarios móviles con una variedad de formas de trabajar que dan la bienvenida y propician la concentración y la colaboración.
  • Oficinas privadas: los usuarios se apropian del espacio para utilizarlo de la mejor manera en sus labores individuales.
  • Patio: promueve el movimiento a través del medio ambiente alentando a los usuarios a seleccionar el lugar correcto para una determinada tarea.
  • Área de retiro: lugar informal que permite a las personas estar solas, o tener reuniones imprevistas.
  • Suite de innovación: espacio que propicia la imaginación, la creatividad, y fomenta el pensamiento crítico.
  • Enclave: espacios pequeños y privados que proveen un respiro, ya sea para concentrarse o relajarse.
  • Área de residentes: espacio individual con herramientas y control personal. Usuarios pueden personalizar su espacio de trabajo y ajustarlo para mayor confort.
El bienestar es una ventaja competitiva en el mundo empresarial de hoy. La recompensa es mayor para las organizaciones con pensamiento avanzado que se preocupan por la salud de sus empleados e invierten en su bienestar, incorporándolo como parte de su estrategia de negocios. El resultado son empleados altamente comprometidos. El espacio de trabajo se ha convertido en un campo experimental que busca adecuarse al nuevo perfil de empleado, ya que recupera una premisa fundamental que determina la productividad en la empresa: el espacio influye en el comportamiento. Desarrollar un trabajo creativo implica entablar conexiones, abrirse a nuevas ideas, tomar riesgos y experimentar. Este tipo de rendimiento es imposible en un estado mental estresado. El espacio de trabajo debe ser, por lo tanto, un ambiente de apoyo positivo, que propicie una mayor participación y un bienestar integral en el empleado, tanto físico, emocional, como cognitivo.
Sin embargo, además del bienestar del empleado, se deben considerar las nuevas oportunidades que existen al participar en un mundo interconectado. Esto propiciará que el nuevo espacio de trabajo se convierta en una ventaja competitiva para la empresa. En la actualidad los negocios son cada vez más desafiantes; las personas deben capacitarse para pasar de un trabajo individual a colaboraciones improvisadas, o interacciones informales no agendadas. La oficina raramente es un espacio que pueda sostener este tipo de reuniones, en otras ocasiones la tecnología y las herramientas son difíciles de acceder y operar.
Las nuevas formas de trabajar exigen nuevos escenarios. El emprendedor debe evaluar qué tipo de empleado busca y adecuar el espacio de trabajo para lograr los resultados que espera. Un espacio de trabajo interconectado permite a los empleados tener la elección y control sobre dónde y cómo trabajar. El tener un sentido de control les ayuda a sentirse con mayor empoderamiento, comprometidos y menos estresados.
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Fuente: Steelcase 360 Magazine