Sería una de las opiniones más fáciles de expresar: México está en auge. Con el desfile de Dior en el Colegio de San Ildefonso, las bolsas de Balenciaga creadas por su director creativo Demna Gvasalia, hasta el renombre de Benito Santos. Salma Hayek sigue destacando, al igual que Checo Pérez. Además, no podemos olvidar la relevancia de Wendy Guevara en las redes sociales a nivel LATAM.
Los motivos mexicanos los vemos en moda, diseño de interiores, diseño industrial, televisión, música y, por supuesto: en el rediseño social, que posiciona a México como una de las fortalezas clave a considerar en la industria del real estate.
El reciente escándalo entre la cantante Angela Aguilar, Yahritza y su esencia, subrayó una vez más la presencia de los cantantes mexicoamericanos en el género regional mexicano. A diferencia de Selena en los 90, esta vez ha sido visto de manera negativa, generando debates en redes sociales entre aquellos que critican no hablar perfectamente español y utilizar spanglish, y quienes celebran esta fusión lingüística en la comunidad “whitexican”.
En contraste, muchos en redes defienden que no beber refresco en bolsita, no disfrutar de cierta comida mexicana o no hablar un español impecable, no te hace menos mexicano. Esto subraya que existe otro México en tendencia, uno más allá de las fronteras geográficas, donde se habla spanglish.
El U.S. Census Bureau proyectó que para el 2060, la población hispana representará el 29% de la población total. En 2021, la tasa de propiedad de los hispanos creció al 48.4%, mostrando un aumento significativo en un mercado inmobiliario complicado.
El punto clave es que, a pesar de las dificultades del mercado, de la disparidad en el acceso a créditos entre blancos e hispanos y las diferencias salariales, el incremento en la compra de viviendas se atribuye al crecimiento poblacional y la estabilización de la segunda y tercera generación en mejores roles laborales. Todo esto, debido a la herencia cultural mexicana, donde comprar una casa es un hito significativo.
¿Por qué es vital para el sector inmobiliario? El mercado hispano está fuertemente influenciado por su herencia cultural. Estos elementos culturales son aquellos que el mercado busca encontrar o reencontrar, abriendo grandes oportunidades para la migración de productos inmobiliarios.
Al mismo tiempo, esto presenta una magnífica ocasión para comercializar propiedades en países hispanohablantes. Aunque no es una estrategia novedosa, es esencial comprender los cambios cuantitativos y cualitativos del mercado hispano, y entender las variables de compra según la generación migratoria.
Aquí 5 conceptos para mejorar tu experiencia de venta:
Conexión Emocional: El valor de obtener una propiedad en el país de origen, utilizándose como argumento racional para adquirir un inmueble.
Multigeneracional: Es común que el mercado hispano compre viviendas pensando en el futuro, pero que en el presente las utilice junto a familiares mayores. Esto crea un equilibrio entre razón y emoción.
Confianza: Para combatir el temor a fraudes, ofrecer un “customer journey” basado en la confianza es crucial.
Facilidad: Es necesario educar sobre los procesos de compra, teniendo en cuenta diferencias legales y culturales.
Consideraciones Culturales: Cada estado tiene características culturales únicas. Es esencial reconocer estas diferencias para mejorar estrategias comerciales.
Y para aquellos desarrolladores que buscan incursionar en Estados Unidos, es vital considerar:
Centrado en la Familia: Las familias hispanas valoran la idea de hogares multigeneracionales.
Amenidades como Núcleo Comunitario: Los hispanos prefieren espacios que promuevan la convivencia, pero que también garanticen privacidad.
Distribución Cultural: Incorporar elementos culturales en áreas como cocinas y jardines puede ser un punto decisivo para la compra.
Educación: La proximidad a distritos escolares de renombre es crucial.
Legalidad Bilingüe: Ofrecer asesoría en ambos idiomas es fundamental.
Con todo esto, entendemos que México está en tendencia, y que no se limita a las fronteras geográficas. La experiencia en ventas y productos de hoy trasciende esas fronteras.